Quizá el dolor pueda ser uno de los motivos principales que llevan a mucha gente a descubrir la medicina china, las necesidades de abordar los dolores con esta ciencia son varias; después de tiempo del tratamiento con otras técnicas no obtengo resultado, la farmacología ya no surte efecto, el dolor mejora con diversas técnicas pero al tiempo reaparece, -“no saben lo que me pasa”-… finalmente encontramos que dichos motivos pueden aplicarse a cualquier patología, pero es quizá el dolor lo que invalida a un gran número de personas, lo que con frecuencia nos impide una actividad normal y por tanto obliga a propiciar un cambio.
La medicina china y el síndrome BI
Para la medicina china, cualquier cuadro de dolor sea del tipo que sea (neuropático, tensional, reumatológico…) se conoce como Síndrome Bi, traducido esto como Obstrucción Dolorosa, dicha traducción hace pe»ectamente una descripción de los motivos fundamentales que llevan a dicho estado de dolor; inflamación, falta de circulación correcta… en definitiva obstrucción que provoca dolor, es decir, Síndrome Bi. En ocasiones el motivo de dicha obstrucción es más que evidente, por ejemplo en un traumatismo, donde no existen causas internas, simplemente un daño por contusión, tracción, quemadura, etc. Pero en otras ocasiones el condicionante es interno y por tanto hasta que no se trate dicha causa, el dolor continuará expresándose a modo de “alarma”. La estrategia terapéutica por parte de la Medicina China proporciona una forma de tratamiento integrado en el cual, de forma específica, se resuelve el dolor pero de manera conjunta se determinan los condicionantes etiológicos y cómo ellos han llegado a dibujar una situación de obstrucción, de bloqueo, de falta de circulación. Pongamos el ejemplo de la Fibromialgia, esta patología tan tristemente desatendida en las consultas de medicina general, neurología, reumatología, termina en ocasiones tratada como una depresión, con fármacos similares a los utilizados en dicho trastorno (Tricíclicos y tetracíclicos principalmente).
Medicina china y fibromialgia
En la medicina china la fibromialgia tiene un condicionante interno el cual ocupa el papel protagonista en está afección, por tanto es imprescindible determinar la causa ya que hasta que ésta no esté localizada, la enfermedad NO mantendrá una mejora constante, como mucho una remisión parcial del dolor puntual.
En el caso de dicha patología, el aspecto alimenticio y psicoemocional es fundamental pero cabe destacar el primero de ellos, pues la alimentación irregular provoca lo que en Medicina China se conoce como Humedad, que podría traducirse como inflamación, en este caso concretamente hablamos de humedad interna, la cual provoca el característico rasgo clínico de dolor generalizado con agravamiento a la presión, como si el cuerpo fuese un completo hematoma. Bien pues ese estado inflamatorio es causa de la falta de respuesta nerviosa adecuada y de restauración celular y la consiguiente afección a nociorreceptores (receptores del dolor) que serán los implicados principales en el desarrollo del cuadro fibromiálgico, esto se conoce en Medicina China como Estancamiento del Qi, dicha carencia no puede sino agravarse con el tiempo entrando en una espiral patológica. Llama la atención como la ancestral observación del cuerpo indiferenciado a la naturaleza describió el estado patológico de humedad tal y como podemos observarlo en el exterior, es decir, la humedad dibuja algo denso, cuyo movimiento se ralentiza, pesado, pegajoso… si preguntamos a cualquier paciente de fibromialgia, nos describirá una sensación similar, de ahí que esta enfermedad se relacione comúnmente con la fatiga crónica.
Conclusiones
En definitiva, la solución claramente estará en regular esos aspectos internos que han llevado a dichos agentes fisiopatológicos a expresarse con cuadros de dolor, por tanto las correcciones alimenticias para frenar y rehabilitar esas causas son imprescindibles, a la par se prescribe tratamiento para la erradicación de agentes nocivos internos, los cuales pueden abordarse desde la Farmacología Oriental o con la propia acupuntura, aunque en la extensa experiencia clínica China se recomienda una sinergía de estas tres herramientas cuando tenemos que enfrentarnos al dolor crónico.